Perder el control remoto de tu Google TV puede ser un verdadero fastidio, sobre todo cuando estás a punto de ver algo bueno. Por suerte, Google TV y Chromecast tienen funciones integradas que te ayudan a encontrarlo sin tener que destrozarlo todo. No es magia: necesitas tener la aplicación y la configuración correctas activadas, pero una vez configurado, es bastante sencillo activar un sonido desde el control remoto. Normalmente, solo se necesitan unos toques en el teléfono. De verdad, te salva la cordura.

En resumen: si tu control remoto no está disponible, probablemente esté cerca, escondido a simple vista. La clave es que tenga Bluetooth y esté previamente emparejado con tu dispositivo. Si no, este método no funcionará y tendrás que buscarlo a la antigua usanza. Aun así, para la mayoría de los controles remotos inteligentes, esto puede ser una gran ayuda, sobre todo si tu sofá es un agujero negro para los pequeños dispositivos.

Cómo reparar un control remoto de Google TV perdido en 7 pasos

Acceda correctamente a la aplicación Google Home

  • Si aún no lo has hecho, necesitas tener la app Google Home instalada en tu teléfono. Está disponible tanto para Android como para iOS. Una vez que la tengas, ábrela y asegúrate de haber iniciado sesión en tu cuenta (la misma que tienes vinculada a tu Google TV o Chromecast).Así es como reconoce tu dispositivo, y ahí es donde empieza la magia.

Esta aplicación es como el centro para controlar y localizar dispositivos conectados a tu ecosistema de Google. Vale la pena comprobar que tu teléfono y Google TV estén conectados a la misma red Wi-Fi; de lo contrario, todo esto no tendrá sentido.

Navega hasta tu dispositivo dentro de Google Home

  • En la app, busca la pestaña «Dispositivos» en la parte inferior. Púlsala. Deberías ver todos tus dispositivos conectados: Google TV, Chromecast, altavoces inteligentes, etc. Busca tu Google TV o Chromecast. Si no aparece, asegúrate de que el dispositivo esté encendido, conectado a internet y en la red.

En algunas configuraciones, este paso es un poco complicado, sobre todo si tu red es inestable. Si no aparece en la lista, simplemente reinicia la aplicación o el dispositivo.

Entra en la configuración de tu dispositivo

  • Selecciona el dispositivo que buscas. Una vez en la página, busca el icono de Ajustes (normalmente un engranaje en la esquina superior derecha).Púlsalo. Ya puedes encontrar el control remoto.

Aquí es donde la cosa se pone interesante. No todos los dispositivos son compatibles con la función «Buscar mi control remoto», pero si la tienen, aquí es donde se encuentra.

Encuentra la opción “Buscar mi control remoto”

  • Desplázate por el menú de ajustes; sí, es un poco complicado. Cuando veas » Buscar mi control remoto», tócalo. Esto debería hacer que el control remoto empiece a pitar o sonar, siempre que esté emparejado y cerca.

Esta función usa Bluetooth, así que no funcionará si el control remoto se ha desvinculado o si las pilas están agotadas. Además, a veces, en ciertos dispositivos, esto es impredecible. En una configuración, funcionó a la primera. En otra, tuve que volver a vincular el control remoto y hacer algunos ajustes.

Reproduzca el sonido para localizar el control remoto

  • Después de tocar » Buscar mi control remoto», pulsa «Reproducir sonido » (este es el botón que hace que el control remoto emita un pitido).Si está cerca, lo oirás inmediatamente. Si no, sigue escuchando o quizás muévete un poco.

Prepárate para un pequeño juego de «caliente y frío».A veces, he tenido que repetirlo porque el control remoto estaba fuera de mi alcance o escondido detrás de un mueble.

Silenciar el control remoto cuando lo encuentre

  • Una vez que lo encuentres, al presionar cualquier botón del control remoto, el sonido debería detenerse. Así de fácil. Si no, regresa a la aplicación y presiona «Detener».Así evitarás pitidos molestos cuando solo intentas ver algo.

Nota: Si el control remoto no suena, verifique que el Bluetooth esté activado tanto en el control remoto como en el dispositivo. Además, asegúrese de que el control remoto tenga pilas nuevas. Claro que Windows o Android lo complican más de lo necesario.

Consejos adicionales y solución de problemas

  • Asegúrate de que tu control remoto sea compatible con esta función. No todos los controles remotos de Chromecast la admiten. Normalmente, los que vienen con Chromecast con Google TV sí la admiten, pero algunos controles remotos más antiguos o de terceros podrían no serlo.
  • Si el control remoto no responde en la aplicación, intenta volver a emparejarlo manualmente por Bluetooth desde la configuración de Bluetooth de tu dispositivo. Normalmente, ve a Ajustes > Bluetooth en tu teléfono. Busca tu control remoto en la lista y conéctalo de nuevo.
  • Advertencia: En algunos modelos más nuevos o después de actualizar la aplicación, la función podría ser un poco inestable o estar oculta tras las funciones beta. Mantén la aplicación actualizada o consulta en línea las peculiaridades de tu dispositivo.
  • Otra opción: apaga el televisor o el Chromecast, reinicia el teléfono y vuelve a intentarlo. Es una vieja lógica tecnológica, pero a veces es la única manera de que todo vuelva a funcionar correctamente.

Resumen

  • Instalar y abrir la aplicación Google Home
  • Localiza tu Google TV en la pestaña Dispositivos
  • Vaya a la configuración del dispositivo
  • Encuentra la función “Buscar mi control remoto”
  • Toque para que el control remoto emita un pitido
  • Escucha el sonido y captúralo

Resumen

Encontrar ese control remoto tan difícil de encontrar no es tan difícil como a veces parece. Con la app de Google Home y un poco de paciencia, es sorprendentemente fácil activar un sonido y localizarlo. Solo recuerda: el control remoto debe estar emparejado y encendido, y tu wifi y Bluetooth deben funcionar correctamente. Si nada de esto funciona, quizás sea hora de comprar un soporte para control remoto o incluso considerar un control remoto universal que sea más fácil de encontrar. Crucemos los dedos para que esto ayude a alguien a ahorrarse mucho tiempo y estrés; siempre es mejor que desarmar los cojines del sofá durante una hora.